
Las urnas han cerrado, David Palmer es el vencedor de las elecciones primarias del partido demócrata y es el momento del discurso de la victoria. Decir la verdad ha supuesto una sorprendente victoria, pero a la vez una derrota en el ámbito personal, su familia se desmorona.

Mientras tanto los Drazen se ponen en contacto con la CTU, quieren hacer un intercambio: Alexis por Jack. Parece que es una cosa sencilla pero Chapelle y el Distrito se niegan, no van a negociar con los Drazen. Jack está por su cuenta.

Que hablando de Jack, se encuentra con los Drazen en una casa de un amigo serbio, en la cual comen algo y planean su siguiente movimiento. Todo parece estar controlado pero con un rápido movimiento, Jack consigue tomar como rehén a la hija del dueño de la casa, amenaza con matarla si no le dejan ir, pero la jugada sale mal, no contaba con que Victor Drazen es un sádico que no duda en matar a la chica. Otro inocente ne la cuenta de Jack.

Nina tras enterarse de que Mason no va a hacer el intercambio, mete a Palmer en el asunto, necesita que mueva unos hilos para convencer a Mason de hacerlo. Palmer le hace una proposición a la que no se puede negar, un ascenso cuando sea presidente. Mason finalmente acepta llevar a cabo el intercambio.

David además de lidiar con toda esta situación, tiene otro asunto entre manos, Patty está muy amigable en las últimas horas y se le insinúa constantemente, cosa que David agradece. Parece que tras las discusiones con Sherry, Patty puede ser la válvula de escape que necesita tras un día tan largo y duro.

Los Drazen llaman a Mason, quieren saber si se va a realizar el intercambio y este acepta. El mismo lleva a Alexis a la localización pactada, pero algo falla, un intercambio va de cambiar dos cosas y Jack no está allí. Mason saca su arma y amenaza a los esbirros de Drazen, pero no contaba con que tenían a Kim, ella vuelve a estar en peligro, por lo que tiene que dejarlos marchar.
Previendo esta situación, le colocan un rastreador a Alexis, pero poco o nada va a durar esa pista, porque los hombres de Drazen lo descubren y lo destruyen.

En la fiesta de la victoria, Patty y Sherry se encuentran en la barra del bar y se descubre que esos coqueteos no son algo casual, es Sherry la que está detrás de ellos, le pidió a Patty que lo hiciera. Es la mejor manera de espiar a David, y lo quiere mantener, incluso dejando que Patty llegue al límite si es necesario.

Tras el intercambio, Jack es liberado, pero no se va a librar tan fácilmente, los Drazen tienen a Kim y si quiere volverla a ver con vida va a tener que hacer lo que ellos le digan. Esto aún no ha terminado.